Pues si, se acabó mi pesadilla, ya soy LICENCIADO en
Filología Hispánica, así que por fin he podido conseguir el objetivo que tanto
esfuerzo me ha costado, no solo el de estudiar, si no el de luchar y convencer
a cierto sector del profesorado que mi esfuerzo y mi preparación a conciencia
para sacar ciertas asignaturas ha sido el optimo y que debería merecer el
aprobado ya que he llegado al punto después de varias convocatorias a
aprenderme el temario de memoria y traspasarlo al examen para demostrar mi valía
y después de no conseguir el éxito, presentarme con los apuntes y pedir revisión de examen o sugerir la
corrección de mi examen por medio de otros profesionales que no eran ellos
porque daban las clases como si se enfrentaran a un pelotón de fusilamiento o como
si les costara la energía y solo aprobaban si les caías bien y si no le caías
bien pues estabas condenado al averno.
Tambien habia gente con poca vergüenza o ninguna que te dejaba bien claro que no ibas a superar la materia porque así lo habia decidido esa persona sin darte ningun tipo de razón.
Para algunos de ellos se le puede dar una explicación
bastante lógica al verlos como actúan con los demás, se les nota a la legua que
están por lo que están y que están allí por medios poco legales y morales, con
esto ultimo me refiero a que no están porque se lo han ganado con esfuerzo
mental y con profesionalidad si no por medios que tienen poco que ver con el
estudio si no mas bien con el arte del trepar y conseguir sus objetivos avasallando
a los demás.
El otro sector del
profesorado (la mayoría y sobre todo los mas veteranos) hacían que una materia
a priori aburrida sea una materia muy interesante y sobre todo inspiradora de
motivación para no abandonar la carrera, se podían decir que dicho sector del
profesorado podían competir en calidad con grandes y conocidos expertos de su
materia. Supongo que lo hacen porque les apasionan lo que están diciendo y
haciendo, viven lo que enseñan y pretenden que los demás aprendamos a tener esa
misma pasión que ellos tienen por lo que hacen y han elegido hacer, a ellos si
puedo quitarme el sombrero.
Pero todo este calentamiento de cabeza ya ha acabado por
fin, ya no tengo que preocuparme de nada ya que me lo he ganado a base de
esfuerzo y tesón y sobre todo después de renunciar y volver hasta poder
terminar.
Eso sí, de mis compañeros/as desde el comienzo de la carrera,puedo quitar el sombrero y mostrar todo mi respeto y
agrade
Ya puedo respirar tranquilo.